La Abeja en el Panal
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Gokushi-rol :: Llegada :: Bienvenida
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La Abeja en el Panal
La Noche se hacía algo fría igualmente que silenciosa, el caminar de los guardias retumbaba en armónicos pasos por el suelo creando una ligera honda de sonido la cual recorría los pasillos de forma abrupta, los reos ya acostumbrados a dicha melodía permanecían en profundo sueño como un infante en los brazos de su madre mientras a unos 300 metros se acercaba aquel ser, una Figura alta y larga que se deslizaba por la superficie barrosa a gran velocidad, quizás a unos 150 Km/s bajo aquel bosque completamente Negro ya que ni la luna hacia presencia aquella noche, de pronto la singular forma se perdería de vista alguna apareciendo frente a la fortaleza gris, Sigilosamente alzaría su vista al cielo con una gélida sonrisa la cual simplemente serviría de ofensa a aquel Dios, sus largos cabellos cubrían gran parte de sus ojos al igual que sus hombros, permanecería de esta forma por algunos segundos para luego comenzar a caminar entre aquel sendero mientras su mirar se apoderaría de aquella gran Muralla frente a sí que sin desearlo ni en sueños se aproximaba, este susurraría apenas..
<< Oh, mi pequeña y acogedora morada... >>
Así en un par de minutos vería su primera víctima, un pequeño hombrecito con su singular traje Azul, junto a sus cabellos permanecía una simpática gorra con una insignia mientras sus manos jugueteaban con un rifle algo antiguo para la época, El extraño ser avanzaría hasta el hombre con una pequeña y amable sonrisa sobre sus labios para finalmente detenerse frente a este, el Hombrecillo le observaría algo asustado por la apariencia del Ser y su extraña amabilidad, sin embargo no alcanzaría a salir palabra alguna de su garganta. Este se apoderaría del pequeño cuerpo uniformado por su cabeza para terminar con una rápida mordida directo sobre la yugular del hombre absorbiendo aquel elixir que le brindaría aquella calidez a sus manos y rostro. Sin más que hacer dejaría caer aquel sujeto al suelo para continuar con un pequeño corte sobre su índice derecho, la sangre se derramaría en fracciones de segundo sobre aquellos agujeros grotescos los cuales cerrarían borrando rastro alguno de aquel acto tan propio de los seres de su naturaleza.
<< Que haremos con nuestro amiguito, Hmm... >>
Tomaría nuevamente el cuerpo del hombre con su derecha para así ocultarlo más adelante entre unas cajas completamente húmedas por la lluvia para después continuar su camino llegando a aquella pequeña puerta de la gran fortaleza la cual no sería obstáculo para el ya que bastaría con un pequeño empujón para hacerla ceder, probablemente aquel hombre uniformado habría olvidado cerrarla por completo, así observaría el interior, una Enorme sala principal con tétricas figuras plasmadas en aquellas frías Piedras que si no fuera por su gran nivel de razonamiento juraría que le observaban, mas al fondo vería algunas puertas mas las cuales sobre si eran adornadas con grandes carteles de fibra, a un costado, a un lado de este se encontraría una cabina completamente de vidrio, En el interior de esta habría un hombre el cual caía con rudeza ante el impotente sueño, algo entretenido este le observaría por un momento para finalmente dejarlo. Avanzaría hasta una de las puertas la cual con sumo cuidado abriría al girar aquella manilla, rápidamente y sigilosamente se apoderaría del interior viendo perfectamente bajo aquellos viejos focos un pasillo el cual terminaba en un tipo de almacén, al parecer un Gimnasio abandonado...
<< ¿Habrá vida en esta posilga?.. Jhm... >>
Avanzaría por aquel Gimnasio libremente notando la No-Vida del sector, este desviaría su caminar hasta otra puerta en el interior de aquel Almacén, sigilosamente caminaría por un nuevo pasillo el cual daría con un tipo de escalera la cual se extendería en opacos metales los cuales apenas harían sentir su presencia por sus pasos tan despreocupados, así finalmente aquella estructura metálica lo conduciría a un tipo de segundo piso, en este lugar se encontraría una gran sala la cual se dividiría en enormes salones ..
<< Vaya, que tenemos acá… >>
De pronto sentiría la presencia de un humano acercar, el latido de su corazón llegaba claramente hasta sus oídos, aquel aroma a sangre hacia variar su cuerpo, aquella sensación de hambre y mareo, rápidamente avanzaría, solamente un ser de su especie podría apenas observar una sombra pasar, así este avanzaría por el costado del Uniformado el cual hacia guardia, este podía leer su mente, ni por un momento sus pensamientos ni su corazón vario, no había rastro alguno de su presencia descubierta en el sin embargo las imágenes mentales le fueron suficiente para darse cuenta de lo que hacia aquel hombre, veía entre las imágenes una gama de hombres de todos los tipos en sus catres planeando a escondidas una redada contra Si, sin duda alguna se encontraba en el centro mismo de la cárcel .. Entre el nido de ratas esperando su fatal destino, el ser oculto por su capucha sonreiría nuevamente mientras se aproximaba más y más a las celdas…
<< Oh, mi pequeña y acogedora morada... >>
Así en un par de minutos vería su primera víctima, un pequeño hombrecito con su singular traje Azul, junto a sus cabellos permanecía una simpática gorra con una insignia mientras sus manos jugueteaban con un rifle algo antiguo para la época, El extraño ser avanzaría hasta el hombre con una pequeña y amable sonrisa sobre sus labios para finalmente detenerse frente a este, el Hombrecillo le observaría algo asustado por la apariencia del Ser y su extraña amabilidad, sin embargo no alcanzaría a salir palabra alguna de su garganta. Este se apoderaría del pequeño cuerpo uniformado por su cabeza para terminar con una rápida mordida directo sobre la yugular del hombre absorbiendo aquel elixir que le brindaría aquella calidez a sus manos y rostro. Sin más que hacer dejaría caer aquel sujeto al suelo para continuar con un pequeño corte sobre su índice derecho, la sangre se derramaría en fracciones de segundo sobre aquellos agujeros grotescos los cuales cerrarían borrando rastro alguno de aquel acto tan propio de los seres de su naturaleza.
<< Que haremos con nuestro amiguito, Hmm... >>
Tomaría nuevamente el cuerpo del hombre con su derecha para así ocultarlo más adelante entre unas cajas completamente húmedas por la lluvia para después continuar su camino llegando a aquella pequeña puerta de la gran fortaleza la cual no sería obstáculo para el ya que bastaría con un pequeño empujón para hacerla ceder, probablemente aquel hombre uniformado habría olvidado cerrarla por completo, así observaría el interior, una Enorme sala principal con tétricas figuras plasmadas en aquellas frías Piedras que si no fuera por su gran nivel de razonamiento juraría que le observaban, mas al fondo vería algunas puertas mas las cuales sobre si eran adornadas con grandes carteles de fibra, a un costado, a un lado de este se encontraría una cabina completamente de vidrio, En el interior de esta habría un hombre el cual caía con rudeza ante el impotente sueño, algo entretenido este le observaría por un momento para finalmente dejarlo. Avanzaría hasta una de las puertas la cual con sumo cuidado abriría al girar aquella manilla, rápidamente y sigilosamente se apoderaría del interior viendo perfectamente bajo aquellos viejos focos un pasillo el cual terminaba en un tipo de almacén, al parecer un Gimnasio abandonado...
<< ¿Habrá vida en esta posilga?.. Jhm... >>
Avanzaría por aquel Gimnasio libremente notando la No-Vida del sector, este desviaría su caminar hasta otra puerta en el interior de aquel Almacén, sigilosamente caminaría por un nuevo pasillo el cual daría con un tipo de escalera la cual se extendería en opacos metales los cuales apenas harían sentir su presencia por sus pasos tan despreocupados, así finalmente aquella estructura metálica lo conduciría a un tipo de segundo piso, en este lugar se encontraría una gran sala la cual se dividiría en enormes salones ..
<< Vaya, que tenemos acá… >>
De pronto sentiría la presencia de un humano acercar, el latido de su corazón llegaba claramente hasta sus oídos, aquel aroma a sangre hacia variar su cuerpo, aquella sensación de hambre y mareo, rápidamente avanzaría, solamente un ser de su especie podría apenas observar una sombra pasar, así este avanzaría por el costado del Uniformado el cual hacia guardia, este podía leer su mente, ni por un momento sus pensamientos ni su corazón vario, no había rastro alguno de su presencia descubierta en el sin embargo las imágenes mentales le fueron suficiente para darse cuenta de lo que hacia aquel hombre, veía entre las imágenes una gama de hombres de todos los tipos en sus catres planeando a escondidas una redada contra Si, sin duda alguna se encontraba en el centro mismo de la cárcel .. Entre el nido de ratas esperando su fatal destino, el ser oculto por su capucha sonreiría nuevamente mientras se aproximaba más y más a las celdas…
Alexandro- Mensajes : 2
Fecha de inscripción : 30/12/2009
Edad : 113
Edad de pj : 0
Re: La Abeja en el Panal
camino muy trankila con mis 2 pistolas una en mi mano y la otra entre mis ropas
no tenia apariencia de guardia iva vestida con mi traje de maid de ciempre y con aquel parche en mi ojos
mientras caminava vi un bulto extraño entre las cajas y me acerq lentamente levante una caqja y vi el inerte y sin vida cuerpo de un guardia mi corazon se acelero un poco y retrocedi un poco para luego agacharme y tocarle el frio cuello al cadaver q tenia una herida de la cual salia la sangre q aun se encontrava tibia
el q iso esto no deve estar muy lejos
corri y entre a la carcel sintiendo el olor de la sangre eso me desia q el criminal aun estava serca y le podria atrapar saque mi otra pistola de entre mis ropas y segui caminando buscando al criminal
no tenia apariencia de guardia iva vestida con mi traje de maid de ciempre y con aquel parche en mi ojos
mientras caminava vi un bulto extraño entre las cajas y me acerq lentamente levante una caqja y vi el inerte y sin vida cuerpo de un guardia mi corazon se acelero un poco y retrocedi un poco para luego agacharme y tocarle el frio cuello al cadaver q tenia una herida de la cual salia la sangre q aun se encontrava tibia
el q iso esto no deve estar muy lejos
corri y entre a la carcel sintiendo el olor de la sangre eso me desia q el criminal aun estava serca y le podria atrapar saque mi otra pistola de entre mis ropas y segui caminando buscando al criminal
mari- Enfermera
- Mensajes : 7
Fecha de inscripción : 14/12/2009
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