Nueva Vida? bah!

Al fin le habian quitado las esposas y aquello que todo el camino le habia incomodado en demasia, su mirada se mostraba seria, oh vaya que no se arrepentia de lo que habia hecho y siendo sincera si tubiera la oportunidad de hacerlo de nuevo lo haria, sus pasos fueron hasta la entrada en donde al parecer ya varios prisioneros charlaban y algunos que otros llegaban, la rubia se limitaba a hacer muecas a pasar de largo a aquellos que le hablaban agresivamente, solo levantaba el menton con orgullo y mostrando la superioridad, sus orejas se movian de vez en cuando captando el sonido, su cola se mantenia caida moviendose al ras del suelo, un guardia le empujo un poco a lo que ella giro mirandole fijamente.
-Puedo caminar sola! -
indicó mirandole con odio, esos bastardos solamente se creian superiores por tener palabra de ley por sobre los prisioneros, pero teniendo la oportunidad acabaria con unos cuantos, encontraria la manera de escapar de ahi aunque las oportunidades sean nulas, se dió media vuelta y continuo caminando...mirando a los que vagaban por ahi, algunos parecian ya...tener el coco lavado ante esos talleres estupidos para los prisioneros, que facil olvidaban, que facil caian...ademas, como si eso fuera a sacarlos de su condena.

Podía sentirlo, el odio hacia ese lugar, el placer y orgullo de haber hecho lo ya hecho, y la esencia de una mente casi tan maestra como la suya propia. Representando aquella adquisición de conocimiento con únicamente una leve sonrisa en el rostro. “Lirith”, mundialmente conocida por ser la causante de la caída de una potencia mundial permanecía sentada en una muralla, leyendo la mente de la recién llegada al lugar, su pelo blanco era la prueba de que estaba usando la telepatía para darse una idea del entorno que la rodeaba aun a pesar de las vendas de sus ojos que tenía prohibido sacarse. De hacerlo, una fuerte descarga la atacaría automáticamente, y esta no pararía hasta que su vista volviese a vedarse, el poder entrar y controlar la mente del resto a través de la mirada resultaba ser muy peligroso y la propia administradora de Gokushi no quería correr ni un riesgo con alguien tan peligrosa, aun si esta solo tenía 14 años.

Así es, una niña de aspecto débil, piel delicada, largos y finos cabellos color blanco tenía la mente y atención fija en la chiquilla que recién llegaba, a pesar de no poder ver. Lo poco que podía entrar en la mente de la chica era lo suficiente para tenerla como candidata a la unión de su plan maestro. Planeaba escapar de Gokushi, y no solo escapar, si no dejar en la ruina a Aina, la directora de aquella cárcel, había podido con un país entero, ¿Por qué no podría con ese lugar?.

Cuando la chica estuvo lo suficientemente cerca, “Lirith”, la pequeña y delicada niña, se limitó únicamente a dirigirle unas palabras – Este podría ser solo el comienzo de la caída de este agujero… - dijo aun presentando su leve sonrisa. Por lo poco y nada que había podido descubrir de la mente de la chiquilla, “Lirith” había concluido que tenerla como compañera no sería mala idea, aunque claro, si esta rechazaba la oferta tampoco sería muy relevante para ella, después de todo tan necesitada no estaba, iba con calma, esperando pacientemente a que se den las condiciones necesarias para su venganza, y si no crearía la situación, y para eso necesitaba gente a su lado, y la niña resultaba ser una competente candidata…

Un tipo bebia agua de un bebedero que ahi se encontraba fue total la malicia de la hibrida de congelar el agua para que este se quedara pegado ahi un buen rato, soltó una leve risilla ante aquello y avanzo rapido para que algun guardia no fuera a reprenderla por aquel pequeño juego, para sus 18 años tenia reacciones demasiado infantiles, aunque a veces solo lo hacia por tomar aquella diversion que de niña no habia tenido, sin embargo algo alrededor le hizo guardar silencio, su mirada se turno seria y pronto comenzó a busca, alguien hacia uso de habilidades y se podia sentir, por mas minima que fuera la habilidad el incremendo en la energia se notaba, caminaba buscando y pronto fue guiada hacia aquella menor peliblanca,de apariencia extraña y mas por aquellas vendas de sus ojos, las palabras que esta dirigio a Ivi hicieron que una sonrisa un tanto enfermiza se dibujara en ella, levanto sus orejas con curiosidad y meneo su cola de un lado a otro muy interesada en aquella chica.
- Apenas voy llegando y disfrutaria tanto ver ya la caida de este asqueroso lugar lleno de reglas-
Indicó la rubia mirando a su alrededor notando como a lo lejos un par de guardias intentaban separar a aquel hombre del bebedero, si hacia algo lo hacia bien, no dejaba rastro alguno aunque sabia que ahi sus hailidades se darian a conocer con el tiempo, debia mantenerse con cautela, sobrevivir hasta el final, faltaba solo conocer las instalaciones a la perfeccion, a aquella directora al control de este lugar, para asi poderse idear un plan y dar fin a aquello.
La apariencia de la segunda era extraña, despertaba la curiosidad de la Hibrida quien solamente sonrió de medio labio y prefirio guardarse las preguntas, borrarlas de su mente y mejor, preocuparse por como salir de aquel lugar, miraba hacia todos lados buscando algo..cualquier lugar que le diera la oportunidad, le habian arrebatado la daga sin embargo contaba con su habilidad, un poco de agua y podia dar fin a muchos en aquel lugar, iniciando por esos perros y enseguida por la cabeza de todo esto, seguramente para que le trajeran aqui tenia una gran relacion con la prision a la que supuestamente la llevarian, sin embargo fue un cambio completo, ahi termino...encerrada en ese pozo del cual se sabia dificilmente se sobrevivia.

Mas curioso aun, la chica parecía reconocer de entre todas las energías de los poderosos reos e internos de aquella cárcel, la suya, carente de entrenamiento y poder debido a la corta edad que la niña en su reposo deslumbraba, quizás fue porque su propia “habilidad” brindada por su “Raza” afectaba tenía que ver con la chica directamente pero eso en aquellos momentos no importaba. La información y los prejuicios sobre ella misma, que como el agua llenando un vaso llegaban a la mente de “Lirith” en su investigación. – Es bueno oír eso… - dijo la niña desde su puesto, sin alzar la cabeza para dirigirse a la persona con la que hablaba, evidentemente, no podía verla, tal y como el ciego que mueve sutilmente su cabeza para demostrar la atención auditiva para comunicarse con el resto, la cabeza de la niña hacía los mismos movimientos, que al principio fueron molestos para ella, pero nada podía hacer por ello por lo que no le quedo otra que acostumbrarse a la obscuridad de una obligada ceguedad.

Las preguntas sobre ella misma que se iban formulando en la mente de la chica que tenía al frente fueron descartadas rápidamente para centrarse en lo que se traducía como el deseo de irse del lugar, y de acabar con los guardias que resguardaban las “calles” de aquella cárcel. Aunque claro, ello no sería lo más inteligente que la chica podría hacer, por lo que la advertencia de “Lirith” fue inmediata – Ni siquiera intentes usar tus habilidades ahora contra esos guardias… ¿De verdad crees que para vigilar a los poderosos reos de Gokushi la directora trae guardias normales? – preguntó sin mirarla, casi como diciendo directamente “soy una telepata y puedo leer tu mente” - Los guardias de aquí son tan poderosos como los reos que cuidan, hacer algo en contra de ellos es lo peor que puedes hacer si estas sola… aunque claro, ello puede cambiar – dijo con una voz un tanto macabra, reflejando directamente que entre sus infinitos pensamientos demostraba tener ya un plan de desarrollo.

-De nada sirve actuar ahora… acabarías con tu vida, y créeme, muerta no sirves de nada – seguía inmóvil mientras dirigía aquellas palabras. Quizás la razón por la que llegó tan lejos en sus planes era por su capacidad para poner de su lado con pensamientos a la gente, cosa que no era extraña teniendo en cuenta los tentadores planes y razonamientos que ella tenía y compartía respecto a un tema de profundidad para la persona con la que hablaba, transformando el ser de “Lirith” en una líder natural, aunque evidentemente no todos sucumbían a sus pensamientos. Después de todo, “Lirith” no obligaba a nadie a ponerse de su lado, era la propia gente la que decidía hacerlo, aun si solo era por un interés en el cual ni uno de los 2 entes que sostenían la conversación salía perdiendo.

Los movimientos de la peliblanca eran similares a los de un ciego sin embargo, algo en el fondo le indicaba la verdad a la rubia quien se mantenia en silencio mirando los alrededores, sin embargo la menor dijo algo que le hizo quedar perpleja, algo que le hizo abrir sus ojos de par en par y retroceder inmediatamente, la advertencia era claramente a sus ideas, a sus pensamientos, tenia en mente que no eran guardias normales, podia sentirlo sin embargo como siempre era capas de encontrar una manera, se calmo al instante, era algo realmente peculiar ya que toda su vida habia estado entre "humanos" hasta con los que se enfrento dia a dia lo eran, presas faciles, solo eso.
La peliblanca parecia centrada en su propio plan, parecia centrada en la fabricacion de uno y al instante la hibrida se dio cuenta de aquello, habia trabajado con la mafia, habia sido la cabeza de la mafia cuando su padre habia muerto y conocia la manera de llevar a alguien de su lado, sabia lo que tenia que decir y la manera en la que debia tratarle, es psicologia no era algo nuevo para ella, se recargo en una pared no muy lejana y ahi mismo miro a la menor peliblanca.
- Estoy conciente de que no son normales, puedo sentirlo, no es dificil distinguir y diferenciar cada tipo de energia-
Indicó mientras movia sus orejas, alerta de cualquier entrometido, de algo que pudiera afectar aquella conversación.
- Es extraño, siento como si fuera inutil hablar-
Agregó, cierto, si la chica podia leer sus pensamiento, ¿de que servia estar hablando? miró una planta cerca y solo sonrió, al parecer no esperaban a criminales con habilidades similares a las de la hibrida, un cuerpo, una planta...las particulas de agua en el aire le permiten rear cualquier arma podia turnar parte del territorio a su favor.
- Soy Oblivion Hamilton -
Indicó mirandole, el nombre de la kitsune se habia hecho reconocer por uno que otro lugar, aquella pequeña, una abominacion, hija de humano y un ser que nisiquiera debia pisar las tierras de los pecadores, el pecado...aquella que habia logrado sobrevivir a la infancia rodeada de polvora y sangre.
Miró a la peliblanca fijamente y cerró sus ojos despues de un momento.
- Para que querrias a una Hibrida de tu lado? de que podria servir una Kitsune como yo?....-
Indicó, en el fondo sabia que la peliblanca estaba conciente de su mente maestra, de la manera en la que podia safarse de malas situaciones y de crear planes que funcionaban de una manera u otra.
Era facil darse cuenta de las intenciones de la peliblanca.

La impresión de la chica tras leer que efectivamente se había dado cuenta de lo que “Lirith” podía hacer con las mentes no dejó de darle gracia a la niña. La cual presentó una ligera y breve risilla de niña para responder al primer comentario de la chica – Entonces no seas tan precipitada para actuar… no sabes cuando las cosas pueden tornarse en tu contra – dijo la niña desde su puesto. Esta vez levantando su mano para juguetear ligeramente con su largo cabello. Quizás no era necesario, pero la niña debía responder a la 2da frase que hacia ella fue dirigida, quizás solo para asegurarse de que la información se daba a conocer de la manera apropiada evitando así malos entendidos que podrían acabar con la relación súbitamente. – Mis ojos vendados me impiden comunicarme por medio de mi mente… por lo que hablar se hace necesario, aun si yo puedo leer la tuya – dijo con tranquilidad, aunque bien sabía que podría leer la mente de la chiquilla únicamente responder a ello, aunque preferiría tener una conversación “normal”.

-Oblivion Hamilton… - dijo reconociendo el nombre de inmediato. La propia niña había servido a la mafia desde temprana edad, relacionándose con ella, llegando a altos puestos y ganando una poderosa influencia en el bajo mundo por las ayudas, planes, trabajos y demases que brindo a un sin número de mafias, llegando a transformarse ella en una figura reconocida mundialmente que se movía en las sombras del anonimato para cumplir con sus cometidos, apodada bajo el delicado nombre de – “Lirith”, es un placer… – se presentó a la niña por el nombre que durante años estuvo entre los 5 mas buscados del mundo entero. Con esa vida era imposible que no reconociese aquel nombre, en una de esas, mas de alguna ayuda brindo la propia niña a la chica, y si no, alguna relación tuvieron que haber tenido.

-…Bajo ese nombre se me conoce por lo que bajo ese nombre me presentaré… “Lirith”- repitió el nombre bajo el que se le llamó cuando con sus variados planes destruyó el gobierno de un país, de una potencia mundial… Los daños provocados por la niña aun se mantenían irreparables para el país, el cual en esos mismos momentos soportaba una guerra civil, iniciada por la propia “Lirith”. – Creo que la pregunta es… “¿Qué es lo que no podrías hacer...? – dijo la niña dirigiéndose una vez mas a la chica – Si eres quien dices ser, y yo soy quien digo ser entonces mas de alguna cosa podemos lograr en cuanto al cumplimiento de nuestros cometidos… - continuó como ofreciendo sutil e ilocutivamente un trato, una “Alianza”.

Off: Discúlpame si hasta ahora me leo mucho como "yo, yo, yo" ^^Uu, es que admito que mi ficha es algo larga y da flojera leerla, por lo que medida lo estimo conveniente te voy dando la información relevante para el desarrollo del rol ^^Uu

Se volvia un tato incomodo al momento en el que Lirith podia leer su mente, sin embargo trataria de mantenerse lo mas normal posible, agradecia que no pudiera ver el movimiento de las orejas, aquella incomodidad se mostraba en eso sin embargo ya trataba de relajarse un poco, habia encontrado a la persona indicada, aquella pequeña...
aquella menor que al mencionar su nombre Ivi abrio sus ojos reconociendola al instante, seguro que de manera indirecta le habia hecho un favor ademas de que su padre llego a mencionar ese nombre.
- Ya recuerdo....quien eres-
Susurró mientras cerraba sus ojos y suspiraba , aquel que queria manejar trabajos turbios en aquel mundo bajo se acercaban inmediatamente con Robert Hamilton o con Oblivion, la pequeña era demasiado lista, su madures se demostro a muy temprana edad y ahi fue donde toda infancia que un niño desea y tiene...fue solamente algo lleno de polvora, negocios, asesinatos y traiciones para la rubia, se cruzo de brazos y meneo su cola de un lado a otro.
Pensando, Lirith era una pequeña exageradamente astuta, sabia coom manejar sus habilidades y todo lo que habia provocado estaba de ejemplo, no dudaria y sin duda se uniria, queria salir de ahi, queria ayudar a aquella pequeña a dar fin a este asqueroso lugar y a su dueña.
-Le seguire......Lirith...-
Indicó mientras le miraba con seguridad, su mirada se volvio sombria al instante, seguro conociendo el lugar encontraria la manera o podria idear un plan adecuado, era capas de tender trampas que funcionaban a la perfeccion de una u otra manera.
No perdia nada al aliarse a aquella niña, no perdia ya nadamas, aun tenia una mafia que sostener, aun tenia trabajos que cumplir, aqui dentro le era casi imposible no planeaba abandonar el trabajo de su padre por mas que su madre lo hubiese odiado.
El caminar de unos hombres detras de aquella pared le hicieron reaccionar al instante y solamente moverse un poco como escondiendose, la prescencia, la energia que desprendian seguro acechaban a alguien y fuera ella o no , no estaba aun dispuesta a averiguarlo, tras unos segundos los hombres continuaron su camino, no usaria sus habilidades hasta que fuera el momento.
- Necesito recuperar mi dagaa....-
Indicó mientras arrancaba una hoja de aquella plantita y esta al contacto se congelaba, a veces no podia controlarlo del todo y cualquier ser vivo que la tocara podia terminar convirtiendose en hielo o ser congelado por dentro morir de hipotermia una cualidad en la hibrida, aquella habilidad, pero, la daga, aquel regalo de su padre para potenciar su habilidad y disminuior el gasto de energia.




off: ah! no te preocupes n.n igual eh leido la ficha! *3* y am, eso, perdona si el post esta raro o asi D: que es temprano XDD.

Esta vez no era por la telepatía, si no por la segunda habilidad de Lirith, aquella que le permitía sentir los sentimientos ajenos sin esfuerzo alguno, como si estos estuvieran en el aire y la niña los captara sin problema u complicación alguna. Podía sentir la incomodidad de la chica tras verse sometida al tipo de relación y conversa que se daba entre ambas, y no era nada raro para Lirith, después de todo la mayoría de la gente con la que hablaba de dicha manera se sentía así. ¿A quién le gusta sentirse profanada en su “intimidad”?, porque la mente es parte de cada quien, es la parte mas íntima que un ser humano puede poseer, una fortaleza impenetrable de la que se revela solo lo que la boca de cada quien puede y quiere gesticular para darlo a conocer a todo el resto. Un almacén de información donde las personas no existen y a cambio encontramos al ser en su totalidad sin máscaras bajo la cual ocultar la naturaleza de lo que somos. Y es curioso, la palabra “persona” significa “mascara”. Nuestra personalidad no es nada mas que lo decidimos mostrar de nosotros a quienes nos rodean – Lo lamento si te hago sentir molesta…- quizás una vez mas que la profanara no haría nada malo si ese era el tema – Pero no puedo darme cuenta de lo que sucede alrededor mío si no es por lo que puedo hacer… soy una chica “normal”, mis sentidos no van mas allá de lo que la edad de mi cuerpo puede reflejar y no digamos que estoy entrenada para captar las presencias ajenas, en estos mismos momentos, “tus ojos son también mis ojos”- hablaba metafóricamente, dando a conocer la información suficiente que le permitiese sostener una relación lo mas normal posible y sin complicaciones.

-Es bueno oír eso… aunque he de dejarte en claro que no soy tu “ama” ni nada por el estilo… No quiero una jerarquía entre nosotras si no una relación de iguales que nos permita relacionarnos del todo y así cumplir con lo que nos hemos propuesto… nadie esta sobre nadie – explicó sin apuro alguno la situación que se daba. No podrían tener plenitud de pensamiento si se regían bajo una jerarquía, aunque también creía que debía haber una especie de “líder” que guiara las piezas del tablero. – Lo primero que necesitamos es reunir más gente… Nosotras solas no podremos hacer mucho por nuestra cuenta, por lo que lo primero que necesitamos es gente que esté dispuesta a colaborar con lo que se le pida… ¿Entiendes a lo que me refiero, no? – habló una vez mas dando a conocer la situación en la que se encontraban ahora, necesitaban gente, en mas de un momento se necesitará la fuerza para acabar con Aina y su cárcel, distractores, ladrones, mientras mas piezas para usar mas fácil sería desarrollar el plan, y explícitamente se lo estaba pidiendo a la chica. – Se hace necesario que reclutemos gente que se nos una, te ruego me avises de encontrar alguno, antes de comenzar a idea un plan debemos tener claro que esta a nuestro alcance y que no – dijo ya más directamente.

Una vez mas movió su cabeza cual ciego busca su oyente – Normalmente los objetos confiscados de los reos se analizan y almacenan en la una cámara ubicada a la derecha de la entrada… si buscas con la vista encontrarás una puerta que guía a un pasillo, si entraste acá con los ojos en perfecto estado (a diferencia mía, que entré con los ojos vendados) entonces tuviste que haber pasado por aquel pasillo… - hablaba como si ella misma estuviera viendo todo eso en aquel preciso instante a pesar de aquella venda. Por lo visto, su mente podía estar fija en mas de una persona sin esfuerzo -… en aquel pasillo, a la izquierda se encuentra aquella cámara...- alzó su mano en señal de alto, inclinando un poco su cabeza en signo de concentración para volver en si denuevo y bajar su mano – En 10 minutos será el cambió de turno, si tienes suerte quizás los guardias se irán antes de que lleguen los otros, si te encargas de un par de ellos sin que nadie te pille dentro de aquella cámara sin vigilancia entonces podrás obtener tu daga sin problemas… - explicó retomando su posición habitual – O podrías esperar a salir al patio y en cuanto salgan con las cajas para llevarse aquellas pertenencias de la cárcel algo diferente podrías hacer -.

A cada cosa que la peliblanca mencionaba Oblivion le miraba con atencion y escuchaba aquello, sus orejas temblaban mientras captaban el sonido no solo de la conversacion, A decir verdad no pensaba en seguirle como mascota o algo por el estilo si no que pensaba seguirle tal y como lo sentia, si alguien aqui debia ser considerada Lider que Lirith decidiera, ivi no pondria objecion ante las desiciones de la chica a final de cuentas ella habia pensado antes en un plan para derrocar a la tal Aina no? se cruzó de brazos algo pensativa y ahora mas que nada...debia ver como acercarse a recuperar su daga, suspiró un poco frustrada pero ya algo habia recordado, escucho todo lo que Lirith mencionaba acerca de aquel cuartillo y pronto una cantidad de energia comenzaba a concentrarse en los pies de la hibrida era nadamas cuestión de esperar el tiempo indicado por Lirith para dejar estallar aquella energia y asi salir disparada a una velocidad que le hacia casi invisible, la velocidad espontanea una habilidad que habia desarrollado tras años de practica y tambien que habia heredado de su especie animal, mantenia los ojos cerrados esperando con cuidado.
- Tratare no hacer ruido....-
Susurró mientras abria sus ojos y cuando el momento fue el indicado se movio hacia un lado y salio disparada, podia controlarlo a la perfeccion, podia mantenerlo hasta que sus energias se agotaran, no era mucho camino a lo cual ignoro lo que podria toparse, se detubo tras un muro esperando a que los guardias abrieran la puerta, miró hacia la izquierda, ahi estaba la camara la cual congelo al instante para impedir que siguiera funcionando y grabara su osadia y asi ella poder pasar rapidamente antes de que los otros llegaran al cambio, apreto sus puños y movia sus orejas ante el movimiento, al fin, abrieron la puerta y esta uso la misma estrategia de antes, avanzo hasta el interior de aquel cuartillo y se agacho justo tras la puerta, los guardias miraron el interior algo desconcertados por la brisa que habia entrado, sin embargo terminaron por cerrar ahi y caminar a su descanso, Oblivion una vez en el interior comenzó a buscar, mirando de un lado a otro hasta que por fin vio aquella empuñadura de un decorado fino, al mirarle esta se congelo a lo que inmediatamente se dió cuenta que se trataba de supreciada arma, pego un brinco sobre una caja y despues de eso alcanzo la daga sin ningun problema al tenerla en manos solamente suspiro y se dispuso a salir del lugar, pero unas voces le invitaron a alamarse, fruncio los labios y escondio la daga en su bota derecha, avanzo con cuidado hasta posarse a un lado de la puerta, un guardia entro al lugar a lo cual la rubia solamente se poso tras de el y al colocar un dedo en su espalda este quedo inmovil un segudo entro y al ver asi a su compañero se acercó a ayudarle, quien sabe que habra pensado que alla sido, el hombre afectado no hablaba y ni gestos de dolor presentaba, la hibrida salio corriendo de ahi con la misma velocidad con la que entro, una vez en los pasillos con mas libertad suspiro aliviada, regresó hasta donde se encontraba Lirith y solamente le miró.
- Supongo que ya varios han intentado entrar ahi sin exito....-
Murmuró respirando algo agitada, recargandose en la pared mientras recuperaba el aire y sus energias, con su mano en su pecho el cual subia y bajaba rapidamente, todo habia sido demasiado rapido pero, sus energias habian sido gastadas en ese poco, no todas, pero si una cantidad que le habia agotado lo suficiente como para estar asi.
- Y siguiendo con el tema anterior...-
Indicó mientras tragaba saliva y miraba a la chica con firmesa.
- En cuanto sepa de alguien te informare inmediatamente para que lo consideres, se que aqui hay mas prisioneros con habilidades demasiado utiles o con una mente que podria favorecernos....yo misma puedo detectarlos gracias al aura de energia que desprende cada uno...-
Al ser una criatura dentro de lo que cabe magica por parte de su madre, sus habilidades le permitian detectar presencias con los mismos rasgos ya que ante el uso de alguna habilidad por algun ajeno significaba un minimo incremento de energia o dependia de la habilidad o ataque, asi mismo buscaria a quienes creyera dignos y llevaria hacia Lirith.
No sabia si por su naturaleza de zorro le era mas comodo seguir a Lirith y ordenes, en este caso Lirith conocia el lugar, sabia lo que decia y hablaba y ademas de que portaba el semblante de lider para su corta edad, Oblivion se acostumbro a seguir su padre, a seguir ordenes sin embargo cuando este murio tubo que aprender a valerselas por si misma y tomar el liderazgo de la banda, aqui ya todo estaba ante las desiciones de Lirith, le gustara o no, le seguiria, habia hablado y no se retractaba para nada, ella solo queria salir de ahi, queria hacer caer a Ania y dar fin a este hoyo.

No fue precisamente por la energía acumulada en los pies de la chica que Lirith supo que se estaba preparando a usar algún tipo de habilidad que ella poseía. Después de todo por la mente de las personas pasan todos esos pensamientos e impulsos eléctricos que manejaban en su totalidad el cuerpo del ser vivo, solo hacía falta reconocer aquellos impulsos para determinar en qué esta pensando la persona exactamente, y así como la muchacha al lado suyo que podía detectar y diferenciar las distintas energías, Lirith lo hacía de igual forma con los impulsos de la mente. Y aquello que leía en la mente de Oblivion llenaba de ansias a la peli blanca, después de todo conocería a fondo una de las habilidad de aquella que seleccionó para sus planes – Veamos de qué estas echa… - pensó en ese instante mientras se preparaba para seguir en todo momento con su mente a la joven.

Se sorprendió cuando esta comenzó a moverse, ciertamente su velocidad impidió a Lirith mantenerse fija en su mente, perdiendo el contacto y retomándolo apenas esta se detuvo casi al instante de comenzar a moverse. – Piensa rápido y no pierde la calma en lo mas mínimo ante una situación así – se susurró a si misma la niña mientras veía en la mente de Hamilton lo que ocurría allí dentro, ciertamente estaba poniendo a “prueba” a la muchacha, como bien dijo antes, es mejor tener en claro cuáles son tus piezas antes de comenzar una jugada, aunque solo con saber la existencia de tus piezas no basta, también influye lo que puede y no puede hacer cada una. –No me extraña, siendo quien es no puede titubear en situaciones críticas – continuó su análisis mientras una leve sonrisa comenzaba a reflejarse en su rostro, de verdad se había encontrado con un excelente elemento. Ya había visto suficiente, comenzó a jugar una vez más con su cabello cuando Oblivion llegó nuevamente a su lado. – Si, ya han sido varios, aunque la mayoría intenta estupideces a la fuerza, los que han llegado mas cerca actúan en las sombras, claro esta, ellos no tenían forma de saber el momento perfecto para actuar – dijo tranquilamente ante la muchacha.

Se le notaba agitada, eso era fácilmente apreciable, no solo por su aspecto físico (el cual Lirith no podía ver), si no también por su estado mental. Cansada e intentando recobrar el aliento. Aquel estado decía mucho, le daba una idea a Lirith de cuánto tiempo podía correr de tal manera, y la distancia a recorrer antes de quedar absolutamente agotada y con sus reservas de energía reducidas a cero. – Esta cárcel ha de estar llena de gente muy útil, te informaré igualmente de encontrar a otra persona… - habló desde su puesto aun jugando con sus cabellos mientras pensaba en las habilidades de la señorita Hamilton. No solo era veloz, debía considerar también en sus cálculos que podía manejar el hielo al punto de congelar completamente a una persona con un ligero toque y eso era bastante útil. Tomaba nota mental de todas esas informaciones en una especie de “agenda” que poseía como forma de organizar sus pensamientos. – De preferencia, sería ideal el buscar a alguien, “experto en el camuflaje”, así este podría robar ciertos archivos y demás cosas que servirían mucho en nuestros planes, tanto como funcionar como espía. Al ser yo la secretaria de la Directora tengo acceso a la información sobre todo lo que sucede en la cárcel, aunque claro, estoy bajo extrema vigilancia, no puedo actuar mucho por lo que hará falta alguien con esas características, yo le diría cómo actuar para robar definitivamente aquellos archivos – dijo con calma para dejar de jugar con sus cabellos, pensando en las necesidades a corto plazo. Aunque no serbía de mucho ahora, Lirith tenía ya pensado cuales archivos les servirían, aunque Lirith no tenía acceso a ellos, si sabía de su ubicación y sería fácil descubrir la vigilancia que estos poseían para crear las condiciones perfectas para robar el documento, pero para ello necesitaban a alguien que pasara sin ser visto.